La Rectoral

Estuvimos un grupo de 6 amigos alojados dos noches. El hotel es precioso y es casi un museo y está perfectamente conservado. El servicio y la atención recibida fue exquisita y muy profesional. Al llegar nos explicaron la historia de las instalaciones. Las habitaciones enormes y con un mirador que te deja con la boca abierta admirando el paisaje. El desayuno es increíble, muy bueno, muy abundante y casero en la mayoría de los alimentos. Zumos naturales, diferentes frutas, bollería, quesos, embutidos y todo lo que puedas desear para comenzar el día. Realmente toda la experiencia fue de 10.

Hotel con un gran encanto, cómodas y amplias habitaciones, nuestra terraza era muy grande y llena de plantas, con unas vistas vistas extraordinarias al pueblo de Taramundi y a las montañas. Desayuno fantástico y el camarero Julio muy amable y servicial

Fuimos mi marido, mi hijo y yo cuatro días a hacer senderismo por la zona ¡maravillosa! En el hotel todo fenomenal desde la llegada hasta la salida. Mención especial al equipo de comedor por su diligencia y amabilidad. Las tostadas de Jesús inmejorables y la comida riquísima toda, es que no encuentro ni un ‘pero’. Muchas gracias a todos y deseando volver.

Tendría que estar escribiendo una reseña con calificación de excepcional, lamentablemente no es así y lo siento de corazón por 2 motivos principales, el primero es por que eso quisiera decir que mi experiencia en el establecimiento había sido también excelente y segundo porque como asturiano, amante de mi tierra y sus gentes me gustaría que todos aquellos establecimientos de mi tierra tuvieran un comportamiento impecable, mas cuando se tratan de establecimientos emblemáticos de la comunidad como es el caso y máxime cuando este no es precisamente barato y tiene una calificación de Cuatro Estrellas, dicho lo anterior, voy a tratar de ser conciso, me siento engañado, contrate una habitación para una escapada con mi mujer, siempre me aseguro que el local posea aire acondicionado, algo imprescindible para mi y casi obligatorio hoy en día para este tipo de establecimientos y categoría, pues al llegar a la habitación nos damos cuenta de que al actuar sobre el termostato este no arranca el mismo a pesar de seleccionar una temperatura fría, lo ponemos en conocimiento del personal y tras comprobarlo nos dicen que “podemos abrir las ventanas” puesto que es un aire acondicionado centralizado y que es una lucha constante con los clientes puesto que todo el mundo percibe las temperaturas de forma diferente, no doy crédito a lo que oigo y manifiesto mi descontento, indicando que mi umbral de frio/calor lo establezco yo y por ello tengo un termostato que regulará individualmente la temperatura en mi habitación, esta persona indica que se lo comunicará al gerente, no volvimos a saber nada más y nos quedamos sin aire acondicionado, recordemos que es un servicio que publicitan y pago por el.. ante la indiferencia del personal a nuestra reclamación, no volvemos a insistir, al día siguiente en el CheckOut nos preguntan que tal, momento en el que vuelvo a trasladar mis quejas, la primera por el aire y la segunda por la indiferencia del personal, se me vuelve a insistir en la “teoría” del aire acondicionado centralizado y se añade que ademas las temperaturas de ayer “no eran excesivamente calurosas” entiendo que tienen un experto por la Universidad de Yale que hace un estudio riguroso he indica cuando son o no calurosas según mis apetencias personales, a lo que añade que por ley no pueden poner el aire por debajo de 27 grados, a lo cual yo manifiesto que eso no es así pero me insiste y zanja la conversación con por encima de todo esta la “ley”, como en ese momento no tengo la información necesaria me limito a pagar y bien pagado mi habitación e irme, es a posteriori cuando me informo de que es verdad a medias o mentira a medias, puesto que esto según el real decreto que lo establece, esto es así para las zonas comunes estableciéndose como excepción las habitaciones por que se entiende que son espacios de “regulación privada” por lo que ahora me siento defraudado, engañado y estafado al pagar una tarifa que incluía un servicio que no se me ha proporcionado a pesar de

Descansamos perfectamente. El desayuno de 10 y la cena buenísima. Muy bien toda la estancia

Comedor con vistas maravillosas,estuvimos sentados precisamente en la mesa que sale en la foto del hotel. Comimos una ensalada fresca de salmón recomendada por el camarero,que estaba espectacular. La carne que comimos estaba en su punto de textura ,se cortaba solo con arrimar el cuchillo. Los postres espectaculares. El personal que trabaja en el servicio muy profesional tanto en el trato como a la hora de asesorar.